En el año 2001 yo llevaba adelante dos espacios culturales donde estaban a la cabeza de Miguel Rottemberg , Entrecasa un bar de encuentros con espectáculos en Salguero 666, y el Teatro del Nudo emprendimiento de Miguel con Lía Jelín que yo llevaba adelante.
Fueron desde un principio sede de TXI y desde ese momento los espacios culturales, teatros en los que formé parte, fueron amigos/sedes/facilitadores siempre de este encuentro.
Porque TXI es un encuentro. Un encuentro de muchos que pensamos parecido y nos hermanos en el Teatro y en lo que representan abuelas y su búsqueda. Un lugar de pertenencia de quienes no pudimos por edad tener un compromiso más activo durante la dictadura pero que siempre la tuvimos presente y doliente.
Con el tiempo se fue consolidando con un trabajo incansable, con la aparición de más de 130 nietos, una verdadera emoción cada vez, y un espacio de hermandad, donde el amor está por encima como sentimiento y donde un grupo de teatreros y teatreras dejan de lado en gran medida sus ombligos y aparece el hecho artístico con una finalidad superior, lo cual siempre soluciona cualquier controversia.
Teatro por la identidad, continúa a Teatro Abierto en el tiempo, le da continuidad a el primer movimiento de resistencia cultural que hubo en la dictadura y lo hace con acierto hace más de 20 años. Construyendo memoria. Hace 10 años quizá pensábamos que esa construcción era una redundancia, ya que la sociedad daba por buena una cantidad de situaciones históricas ya dirimidas en la justicia y en el inconsciente colectivo.
Hoy nuevamente todo o casi todo se pone en tela de juicio y más que nunca se resignifica TXI y su lucha incansable y necesaria.
En lo personal me siento honrado de formar parte desde mi lugar de facilitador para que las cosas sucedan, de ese grupo hermoso de gente/familia de TXI, de vivir noches emocionantes, de encuentros y de memorias tristes y necesarias.
TxI como todos los movimientos que trascienden el motivo de su origen, hoy es un espacio de referencia para muchos, de compromiso de disfrute y de trabajo. Nos da a quienes hacemos teatro la posibilidad mágica de realizar o compartir un hecho artístico y además con el compromiso que hace que ese hecho sea completo, con la participación de Abuelas y esas maravillosas mujeres que tanto nos han enseñado como sociedad y hoy son referencias para muchos.
Gracias TXI por estos 20 años, nos han hecho mejores.