El último 31 de Marzo se celebró, en todo el mundo, el Día Internacional de la Visibilidad Transgénero. Un día donde se trata de sensibilizar en contra de la discriminación, violencia y el derecho a la identidad hacia las personas transgénero en todo el mundo. Les resulta indispensable no mostrarse como víctimas, sino como personas sujetas de derechos, visibilizadas, orgullosas de hacer propio su derecho a transitar por el mundo sin miedos de ser violentadas y, lo fundamental, con la convicción de estar seguras que sus vidas valen y merecen vivir dignamente, algo de lo cual todavía no se ha llegado en muchos lugares del mundo. El propósito de este trabajo es reflexionar acerca de la violencia ejercida hacia el colectivo en nuestros días, la estigmatización que sufren día a dia las personas que eligen algo que no va con la norma”, es decir, con la noción binaria hombre/mujer basada en la genitalidad, mas no en la autopercepción: un rasgo fundamental, hoy en día, inseparable de la condición humana. Analizaremos la precariedad de sus condiciones de vida y la lucha por mejorarla, en el contexto de lo que nos interesa entender que es la identidad en general, y en particular la identidad sexual, cultural de genero contra aquello que nos han impuesto desde un sistema patriarcal de creencias.

El artículo tiene como objetivo reflexionar sobre el potencial de la gestión cultural como herramienta de resistencia a las dinámicas hegemónicas del capitalismo y el papel del arte colectivo como instrumento de construcción de identidad comunitaria. En primer lugar, se trabajan los conceptos de hegemonía y violencia simbólica y su relación con la cultura; en segundo lugar, se abordan los desafíos y contradicciones en la ampliación de los repertorios artísticos; y finalmente se reflexiona sobre la construcción comunitaria de lo simbólico, para repensar el carácter político de la gestión cultural.

Esta ponencia se enmarca dentro del Proyecto PIACyT 34/0656, Géneros, Cuerpos y Prácticas Performáticas en las Artes Visuales. En Argentina 1980, sobre el eje Género y Diversidad vinculado a Pensamiento e Identidad. Proponemos centrar la mirada en los matices, cambios, aperturas, transformaciones en la construcción política de los cuerpos y de los discursos sociales, tomando el pasaje del último gobierno de facto en Argentina al inicio de los gobiernos democráticos en la misma. A comienzos de la década de los 80 prevalece un cuerpo atravesado por los discursos de control, censura y tortura imperantes en la última dictadura militar; un cuerpo que también intenta dar cuenta de lo omitido en consonancia con la apertura democrática, que a su vez tiene su correlato en las manifestaciones artísticas como el Happening o la Performance: cuerpos performáticos, cuerpos y discursos sociales e individuales, controlados y fragmentados, que empiezan a visibilizarse en un intento de reconstrucción. Con la democracia los cuerpos y diversidades comienzan a manifestarse en la entonces Capital Federal desde el circuito underground. Circuitos alternativos donde les artistas crean y exponen su mirada cuestionando los géneros tradicionalmente impuestos y el rol atribuido a la “identidad” de género. En este sentido, encontramos esa identidad como algo fijo, estable pero también como algo manipulable, sustituible o intercambiable. Es materia de nuestro trabajo investigar los caminos recorridos para visibilizar y reconstruir “ese” cuerpo, “esas” identidades en una sociedad fragmentada y el pensamiento que llevó a esa fragmentación.

¿Por qué fascina e interesa tanto eso que nombramos cuando decimos “identidad”? Porque en la historia del pensamiento, de la filosofía, de las ciencias sociales y de las artes, ha estado presente la identidad, ya sea como tema o problema a ser pensado o como categoría estratégica de alguna teoría. En la primera parte de este texto que sigue retomamos a Pablo Navarro, autor que propone una aproximación que nos parece sugerente. En la segunda parte abordamos algunos aspectos sociológicos que toman en cuenta factores que se encuentran presentes en las sociedades complejas del Siglo XXI, especialmente lo que significa la existencia de un abanico de identidades llamadas identidades de género. Finalmente, ofrecemos algunas notas breves, acerca del papel de la capacidad dramática de las personas y su potencial para establecer relaciones lúdicas y significativas con la identidad.